3 razones por las que el Headhunting tradicional APESTA

Es posible que alguna vez hayas recurrido a headhunters para llenar algún puesto importante en tu empresa. Muchos de nuestros clientes lo han hecho en una o varias ocasiones... Y sus experiencias han sido, en su mayoría, muy mediocres.

La verdad es que la mediocridad reina en el headhunting tradicional. Y aunque puede que haya una que otra excepción, el mercado en general apesta. Y hay tres razones principales por las que apesta.

Antes de eso, hay que decir algo: En PERFORMIA hacemos headhunting, y lo hacemos de manera muy diferente a la tradicional. Así que nuestras opiniones al respecto no son imparciales.

Pero te invitamos a observar con tus propios ojos, y ver si solo estamos desacreditando nuestra competencia... o si realmente hay un problema serio con el headhunting.

Estas son las tres razones por las que el headhunting tradicional APESTA:

- 1. Siempre te prometen TERNAS:

Una terna es cuando un headhunter entrega tres candidatos entre los cuales el cliente puede escoger. ¿Tener más de donde elegir? ¡Parece razonable!

Pero cuando un headhunter promete una TERNA, tiene un problema:

¿Qué hace si solo tiene un candidato bueno?

¡Pues tienes que llenar la terna con lo "menos peor" que haya!

Algunos headhunters tienen pruebas que permiten evaluar cosas que no se ven en una entrevista, y gracias a ellas pueden saber quién es el candidato más adecuado para ti. Pero tú usualmente no tienes esas herramientas, y una terna implica que la decisión final depende de la impresión que cada uno de los tres candidatos te cause... En vez de las cosas realmente importantes como la productividad, la responsabilidad o las habilidades real de los candidatos, que no se ven a primera vista.

Y así, demasiado a menudo a los empresarios contratan alguien de "relleno", en vez del verdadero candidato ideal...

Un candidato realmente increíble es a menudo uno entre cinco mil, y encontrarlo es extremadamente difícil... Y si esperamos a encontrar a otros dos, el primero conseguirá empleo. ¡Por eso cuando encontramos a alguien que sería ideal para ti, te lo presentamos de inmediato, y sin "rellenos"!

- 2. Siempre te prometen PLAZOS:

De nuevo, ¡suena razonable! Necesitas llenar tu vacante urgentemente, así que el headhunter te ofrece un plazo limitado para hacerlo. Parece lógico y práctico.

Pero de nuevo,

¿Qué pasa si tu headhunter no consigue a un candidato verdaderamente adecuado en el plazo que te ofreció?

¡Te tiene que entregar a alguien mediocre!

Y como además te prometió una terna, te tiene que entregar a TRES candidatos, ¡ninguno de ellos adecuado para tu empresa!

Esta es la razón por la que NUNCA prometemos ni ternas, ni tiempos. Te entregamos al candidato indicado, en el menor tiempo posible… Pero si alguien bueno no aparece en un mes, jamás te entregaremos a alguien mediocre.

- 3. Practican CARRUSEL de CANDIDATOS:

Esta es la práctica más desagradable del headhunting tradicional, y algo que la mayoría de empresas de headhunting hace: Te prometen en su contrato que no van a llamar a tu candidato en uno o dos años…

¿Pero qué crees que pasa luego de esos dos años?

¡Llaman a tu empleado, que después de dos años de entrenamiento y establecimiento por fin comienza a ser realmente productivo, y se lo venden a otra empresa! De hecho, cuando te lo entregan a ti, probablemente lo acaban de sacar de una empresa también.

Claro, no todos los headhunters lo hacen… Pero conocemos muchos que sí.

En Performia queremos romper las malas tradiciones del headhunting tradicional.

Cuando reclutamos y seleccionamos a alguien para ti, nos enfocamos en que consigas a un candidato que sea realmente productivo, que esté contento con su trabajo, y se quede en tu empresa.

Así que te invito a agendar una cita con nosotros, y te explicaremos qué es lo que hacemos, cómo lo hacemos, y qué nos hace tan diferentes del headhunting tradicional.

Escríbenos por nuestra página de contacto, o usa el botón en nuestra página de inicio para agendarte directamente en nuestro calendario.

¡Y te veremos allí!